El mes pasado, el gobernador Abbott designó la “integridad electoral” como un tema de emergencia, lo que le permitió a la legislatura priorizar los proyectos de ley dentro de ese tema. Después de semanas de informes vagos sobre la preparación de un proyecto de ley general, el Proyecto de ley 7 del Senado se presentó anoche tarde.

A primera vista, algunas de las disposiciones más problemáticas de la SB7 incluyen:

• Ampliación de los poderes procesales del Fiscal General en casos de violaciones del registro de votantes, ya sean intencionales o accidentales.
• Prohíbe a los condados enviar de forma proactiva solicitudes de votación por correo
• Prohíbe que los condados operen sitios de votación anticipada después de las 7 p. m.
• Obliga a cualquier persona que quiera votar por correo porque tiene una discapacidad a proporcionar documentación específica
• Dispone que cualquier persona que se encuentre en el automóvil con un votante que esté votando en la acera será considerada oficialmente un asistente según la ley y deberá firmar el formulario que documente que brinda asistencia.

Un estudio del año pasado demostró que ya es más difícil votar en Texas que en otros estados.

Declaración del director ejecutivo de Common Cause Texas, Anthony Gutiérrez

“Ya es más difícil votar en Texas que en cualquier otro estado y el Proyecto de Ley del Senado 7 lo haría considerablemente más difícil.

Ken Paxton nos ha demostrado sin lugar a dudas que aprovechará la oportunidad de utilizar su cargo con fines puramente políticos, como tratar de anular los resultados de una elección presidencial. Darle poderes ampliados para enjuiciar errores en el registro de votantes es una idea totalmente mala.

Este proyecto de ley continúa un patrón que hemos estado viendo a lo largo de la pandemia: los trabajadores electorales del condado hacen todo lo posible para encontrar formas de permitir que los tejanos voten de manera segura y protegida, y el estado hace todo lo posible para detenerlos.

Este proyecto de ley tiene claramente un único propósito, y es ayudar a los políticos en el poder a permanecer en el poder.

El verdadero problema que se debe abordar en Texas es que hay muy poca gente que participa en nuestro sistema democrático. Deberíamos hacer cosas como implementar el registro de votantes en línea, mejorar la educación cívica e invertir en nuestra infraestructura electoral.

“El Proyecto de Ley 7 del Senado y toda esta narrativa de la ‘integridad electoral’ no son más que un intento de dificultar aún más la votación en Texas”.