La votación de hoy es un paso importante para romper el estancamiento que ahora paraliza nuestra democracia y una victoria crucial para todos los que creen que el gobierno debe funcionar como lo pretendían los redactores de la Constitución: bajo el principio de la regla de la mayoría.

“Todos hemos estado observando un cierre gubernamental en cámara lenta durante años, y esto permitirá que el importante trabajo de revisar y confirmar las nominaciones presidenciales se ponga en marcha nuevamente”, dijo Karen Hobert Flynn, vicepresidenta sénior de estrategia y programas de Common Cause.

Pero el Senado sigue estando descompuesto y el cambio de reglas de hoy es una pequeña solución a un problema enorme. La minoría aún tiene el poder de usar el filibusterismo para bloquear el debate y la acción sobre la legislación que favorece a la mayoría. Como observó el líder de la mayoría, Reid, en el pleno del Senado esta mañana: «La necesidad de un cambio es muy, muy, obvia».

Nuestro gobierno no volverá a funcionar como debería hasta que el Senado cuente con normas permanentes que protejan el derecho de la minoría a expresar plenamente sus opiniones, incluyendo el derecho a proponer enmiendas pertinentes a la legislación, permitiendo al mismo tiempo que la mayoría, en última instancia, dicte su voluntad. Common Cause seguirá impugnando la constitucionalidad de la regla del filibusterismo y su requisito de 60 votos ante un tribunal federal; nuestra demanda en el Circuito de Washington D. C. está programada para mediados de enero.

Junto con otros miembros de la Coalición para Reparar el Senado, Common Cause lleva varios años luchando por este tipo de reforma. Nos complace que se estén logrando avances, pero la batalla está lejos de terminar.